Existen varios factores que determinan el valor de una vivienda como son la ubicación, el tamaño, el desarrollo económico de la zona, el estado del mercado (la oferta y demanda de inmuebles), la antigüedad y los valores adicionales como obras complementarias del inmueble. Las cuales explicaremos más adelante para tomarlas en cuenta el momento de valorar tu vivienda.
1. Ubicación de la propiedad
Si bien la zona donde se ubica la vivienda influye en el valor también incide la posición en la manzana o si se ubica en los niveles superiores de un edificio.
Por la ubicación en la manzana los terrenos denominados esquineros suelen estar mejor valorados al poseer varios frentes hacia la calle, esto genera que se puedan crear más accesos, posee una mejor entrada de luz y ventilación mejorando la calidad funcional de la vivienda.
Con respecto a departamentos en edificios, se debe tener en cuenta el piso en el que se encuentra, puesto que los niveles más altos del edificio van a tener un mayor valor por contar con mejores factores de vista, iluminación y disminuye el ruido del exterior.
2. Tamaño de la propiedad
El tamaño de una propiedad presenta un mayor costo siempre y cuando se encuentre en una buena ubicación, es decir una propiedad con gran área en una zona rural puede ser más grande que un departamento en el centro de una ciudad, pero su valor no se compara debido a que el departamento se implanta dentro una urbe con un mayor desarrollo de servicios y equipamientos.
3. Desarrollo económico de la zona
De la mano con el ejemplo mencionado en el anterior punto, el centro de la urbe presenta una gran cantidad de equipamientos y servicios básicos que proporcionan un plus a la zona donde se emplaza la edificación, contando con mejores vías de comunicación, transporte público, zonas de recreación, zonas financieras y comerciales todo esto genera un valor agregado respecto a otras zonas en donde pueden carecer de estos servicios.
4. Antigüedad de la propiedad
Se debe considerar la edad de una vivienda para poder determinar una vida útil aproximada, la misma que nos dará a conocer qué tipo de remodelación es importante realizar dependiendo de la edad de los acabados y materiales utilizados. Toda remodelación genera un plus en el valor de la vivienda.
5. Estado del mercado: oferta y demanda de inmuebles
El precio también se ve afectado por la oferta y la demanda que exista, si hay una gran oferta de propiedades similares a la tuya, los precios tienden a bajar y si por el contrario hay muchos compradores y pocas viviendas, los precios aumentarán, así se comportan todos los mercados, no solo el inmobiliario.